Por: Julián Machado, coordinador de la campaña NoCopio
Tatiana Castrillón, ilustradora conocida como Tato, tiene 32 años y hace cinco se dedica a la ilustración. Sus dibujos hoy conforman la más reciente exposición que lidera la campaña NoCopio en algunas bibliotecas de la red de Comfenalco en el Área Metropolitana del Valle de Aburrá.
“Fue amor a primera vista, me gustó mucho el proyecto, tiene mucho sentido. Es un tema que nos abarca a todos”, explica Tato sobre su trabajo con esta campaña ciudadana. Ella dibuja sobre la cotidianidad, lo que piensa y lo que siente. Le gusta, como en este caso, tratar temas sociales.
Para Tato, el arte es una vía para desahogarse y caer en cuenta de muchas cosas que suceden en el país y en la región. “Creo que el arte transforma”, concluye.
Sus obras estarán expuestas en las siguientes bibliotecas de la red de Comfenalco hasta febrero del 2022:
- Biblioteca Comfenalco La Aldea – Kalatrava Itagüí
- Parque Biblioteca Belén
- Biblioteca Centroccidental Comfenalco – UVA El Salado – San Javier
- Biblioteca Pública Comfenalco Castilla
- Biblioteca Pública Comfenalco Niquía
Sobre la obra
El lenguaje es una herramienta de cambio social muy poderosa y la campaña NoCopio lo ha utilizado para desnaturalizar el homicidio y no para justificarlo. Romper con estos ciclos de violencia significa aumentar el costo moral a los asesinatos, que todos duelan por igual y que seamos una ciudad veedora y cuidadora de sus jóvenes y de la vida de todos y todas.
En esta exposición, disponible en cinco bibliotecas de la red de Comfenalco, la campaña NoCopio busca hacer consciencia de esas narrativas que justifican el homicidio. Cuando matan a alguien en Medellín lo primero que sucede es buscar una justificación. En la mayoría de los casos, la encontramos en la víctima: “Lo asesinaron por que era tal cosa”, “la asesinaron por que estaba en cierto lugar”, “los asesinaron porque hacían tal cosa”. Nunca en esa búsqueda se cuestiona al homicida.
Estas narrativas ayudan a mantener vivos los ciclos de la violencia homicida. El único que se equivoca al momento de acabar con la vida de alguien es quien lo ejecuta. Nada que una persona haya sido o haya hecho justifica su homicidio. Nadie sobra en esta ciudad, a todos y a todas las necesitamos.
Las obras se construyeron a partir de muchas conversaciones con personas de la ciudad y funcionarios de la red de bibliotecas de Comfenalco. La campaña identificó esas expresiones más comunes y cómo se relacionan con características de los y las jóvenes; la artista muestra en cinco ilustraciones de gran formato cómo en la narrativa le entregamos la culpa a la persona asesinada y nunca al homicida.
Nos parece fundamental coincidir en algo: NADA JUSTIFICA EL HOMICIDIO. Es necesario exigirles a los gobernantes que sean eficaces en proteger los barrios y sus habitantes, y que la reducción de homicidios sea prioridad en la agenda pública.
