¡Bienvenides a Morada!
Un parche para habitar con amor.
Nea, lleguese y contruyamos juntes la ciudad soñada e imaginada. La casa es un espacio para la amistad y la creación.
Morada + Parche= Encuentro y refugio
En Morada encontrarás parceres, refugio y una red de protección. Sabemos que lo más importante, es la conexión afectiva, el sentirse parte.
Nuestras Casas Culturales están abiertas para todes les parceres, donde se conectarán con personas y organizaciones inspiradoras que sepreocupan por su bienestar. Parce aquí creemos en las segundas oportunidades, parche sin miedo que juntes construimos otras prácticas e identidades.
¿Cómo
funcionamos?
Parce Morada es puro corazón y pasión, y aunque no hay jefes, ni directores, eso no nos detiene. Nos movemos gracias a la generosidad, el trueque, el parche y el voluntariado. Nuestra onda es la ciudad, el arte, el placer y la conexión con los demás.
¿Cómo que
Morada?
El nombre Morada proviene del verbo “morar”, que se traduce como “habitar con amor”. Porque es más que un lugar físico, es habitar en movimiento, pertenecer sin poseer. Y el color morado nos representa por esa reconciliación ¡Por eso, es nuestro sello!
Sólo se puede amar lo que se habita.
¿Qué
hacemos?
Pensar por sí mismos, revelar injusticias, expresarse en libertad y decir ¡basta! Creemos en la rebeldía amorosa, en promover en el día a día la pregunta constante y el cuestionamiento de realidades injustas, violentas y excluyentes. Amamos el arte, es nuestra esencia. Porque aquí, el arte es más que una forma de expresión, es rebeldía, es crítica, es inconformismo.
Y la ciudad, ah, Medellín… la vivimos intensamente. Hay lugares y personas que nos llenan de amor, pero también hay lados oscuros
que rechazamos. Queremos agobernar, hacer redes y colectivos que nos mantengan al margen de un estado que no nos deja enamorar, de gobiernos que nos prefieren productivos que enamorados. Queremos una ciudad donde el amor sea auténtico, donde todos podamos ser lo que queremos
¿Quiénes
somos?
Somos meros calidosos, jóvenes y adolescentes conectados, sin jerarquías, ¡todos aportamos! Hay parches feministas, antirracistas, amistad con profes, artistas, Editores de Ciudad. Mejor dicho, caiga pa que pille como es la vuelta.
¿Dónde
estamos?
Tenemos dos parches ubicadas en el barrio San Javier que quieren ser un punto de encuentro para toda la ciudad. Compartimos sede con la Fundación Casa de las Estrategias, Editores de Ciudad, Echando fuego, Semilla de poder, Lxs peludos, Cabina abierta, Flores del cuidado , Círculos de cuidado.
Morada Raíz (Carrera 97 #40-26)
Encarrete Morada (Calle 40 # 101 A 39)
Morada
es...
Nuestra casa, nuestra tribu, nuestro refugio, nuestro parche. Y todes, construimos una ciudad llena de sueños, amor y arte.
¡Somos Morada, y juntes vamos a cambiar el juego! ¿Listes para ser parte de la movida más parchada de la ciudad? ¿Nospi o qué?
Nuestra
filosofía
Morada se inspira en el manifiesto del Colectivo Morada y en su decálogo para orientar y plantear filosóficamente las finalidades de los procesos. Se trata de un presentar que orienta a concentrarse en el presente y por ello se piensa desde las realidades particulares. Con ello en un aser en el otro, en la otra, como meta, y en la existencia de la colectividad y la colectividad entre adolescentes en escenarios para crear en conjunto.
El manifiesto del Colectivo Morada lleva a adolescentes a posicionarse ética y políticamente en sus realidades concretas y puedan pensar y actuar crítica y creativamente sobre ellas.
Decálogo
Aser
El otro es la meta, así como la persona sin reducción es un mundo por conocer la aventura más bonito. Todo lo que te pasa a vos, lo que sentís me importa y con tiempo lo puedo comprender como si lo estuviera sintiendo o entendiendo que también me pasa.
GozarNo cambiaremos la culpa por el gozo, por eso el olvido será un derecho, nadie podrá arrebatar nuestras ficciones y nos moverá siempre el poder.
Errar y despertarse
Nos gusta perdernos y creemos en fracasar mejor. Nos desprendemos de lo que no sirva para crear y venceremos las fantasías del consumo construyendo la riqueza de necesitar poco, la filosofía cada vez más libres y la metodología de ser libres todos.
Amar al desesperado y reconocer en el rostro del desprotegido y en el cuerpo del oprimido, el rostro más querido y el cuerpo más amado.
Corporalizar
La esencia es la piel y nuestra patria es el cuerpo. Nuestra ilusión sagrada es la corporalidad compartidas y al cuerpo propio no le tendremos miedo y en el otro estará el cuerpo como referencia de tantas formas de amar.
AmarAmar es una rebeldía, es más que una resistencia pero sin duda es una oposición a la mezquindad, a la codicia, es recuperar lo esencial, es devolverle al cuerpo su único lugar y al alma su mejor movimiento. Amar como un acto que nos hace indomables, insobornables, improductivos, esclavos sólo de nuestra propia creación.
Abellezar
La belleza es sustantiva, es una fuerza y una poderosa inquietud, la belleza se esconde en todos los lugares, tiene como patente de la justicia, la tienen instituciones obsoletas, diremos que algo n oes bello.
PresentearNo dejaremos que nadie nos venda el futuro. Nuestras urgencias son sagradas y todo pasa ahora.
Agobernar
Hacemos redes y colectivos que nos mantengan al margen de un estado que no nos deja enamorar, de gobiernos que nos prefieren productivos que enamorados. No necesitamos líderes, no necesitamos controles y vamos a reclamar la ciudad que nos inventamos.
Unir y solitariar
El nosotros está en expansión permanente y estar juntos es un fin. Sólo podemos ser libres si acabamos con la angustia de todos y nadie se queda atrás. Necesitamos vaciar el espacio. El silencio que se construye en la soledad y nadie nos podrá obligar a estar juntos o quitarnos de la soledad amada y elegida. La soledad es un método para mayor conocimiento, derecho y placer. Así una como plataforma para amar.
Conocer y crear
Saber no será un medio, si no una meta, a veces más importante que la felicidad. Y el oficio será nuestra única riqueza. Renunciaremos a las dignidades y reconocimientos que nos conduzcan a crear, por lo cual no trabajaremos más de lo que obligue la belleza.