—Perdón, es que soy muy penosa —comentó con una risita tímida. —Y yo odio estas cosas —dije— ¿Te obligaron a venir? —Pues la verdad fue una amiga, estábamos viendo Tinder cuando te vimos y las dos estuvimos de acuerdo. Ella quiere como que yo esté estable con alguien…...
Somos unos maricas que siempre nos quejamos de todo (eso me incluye, por supuesto), hartos de todo, hastiados, quejándonos por lo que tenemos y lo que no. Además de una ciudad que odiamos, que fingimos ser el ombligo del mundo, matándonos con drogas de mierda para...
Y allí, tras la negrura de la tramoya, ella: pequeña, desamparada, angustiada y abandonada por un destino truculento y escaso de compasión, observaba sintiéndose impura como asqueada por la piel que la cubría, pues con solo ser la vil e insulsa daifa del director de...
—¿Y entonces usted qué piensa de la vida? Ahí va otra vez, pensé, otra diatriba de mi madre de por qué no he podido ser un adulto responsable. Todo estaba tranquilo y calmado, acostado en mi cama leyendo relatos policíacos mientras escuchaba jazz y swing de los años...
I. Me desperté como si no hubiera dormido, o sea sobresaltado, como si hubiera soñado -¿o vivido?- aquello que a veces me sobrecogía, me excitaba y a la vez me atormentaba: ella. En el momento de sentarme en el borde de la cama toda la habitación me dio vueltas por...